La curiosidad por mi primera experiencia obtuvo muchos resultados, no tanto en separarme del cuerpo físico si no, sobre todo sensaciones nuevas antes de dormir, expansiones de conciencia que no había experimentado antes... estaba descubriendo un mundo nuevo!. Pero no quedaron registrados en un papel, y poco a poco se fueron desvaneciendo en la memoria. Leí todo tipo de libros y experiencias de otras personas para que me ayudasen a entender un poco quién era, y qué era lo que ocurría. Poco a poco lo fuí comprendiendo.
7 de Febrero de 2010 (primera experiencia real de desdoblamiento)
Era Domigno, y me fuí a dormir la siesta. Un día tranquilo como otro cualquiera. Estaba en casa de mi padre. Me despierté a medio sueño, con una sensación muy extraña, como de malestar. Al mover mi mandíbula tipo bostezo, noté un agresivo aumento de la sensación, molestia grande en los dientes y por todo el cuerpo, por lo que decido levantarme (todo ha durado como unos 10 seg, aunque no soy consciente del tiempo real). Al incorporarme en la cama me doy cuenta que, en realidad, no me he levantado, y decido abrir los ojos. Veo la habitación, pero con una especie de velo azul, que no he vuelto a reconocer a lo largo de la experiencia. Soy consciente de donde estoy, ya lo había leído muchas veces así que decido saltar y emprender el vuelo. Atravieso el techo (sin ser plenamente consciente) y decido poner gran atención a cada una de las capas. Había leído en un libro de Robert Monroe, que podías poner atención y observar cosas que de otra manera no podrías. Pongo atención en el material en que está hecho el techo, intento sentirlo y acto seguido se me dibuja en la mente un pequeño esquema del techo, como un holograma o algo similar, cuesta recordar, pero parecía un corte transversal con cada capa expuesta (yeso, ladrillo, tuberías, etc.). Soy consciente de las tejas que recubren el tejado, y las noto mojadas (estaba lloviendo). Note la humedad de una gota que descendía del canalón, pero no le dí importancia.
Al salir decido ir a ver a mi hermano, y una sensación que no consigo asemejar a nada me recorre el cuerpo. Me doy cuenta de que al instante estoy en pleno centro de la ciudad, cerca de donde vive mi hermano. Comienzo entonces a fijarme en la sensación del aire al volar, pero no he sido capaz de darme cuenta, sin embargo, me ha mojado de nuevo un poco de agua (que no se de donde) y he podido sentirla.
He visto una carretera con un gran atasco y decido bajar a ver los coches. Fuí capaz de meterme en dos:
- en el primero había 3 personas, 2 delante y una detrás. Miré a la de detrás fijamente y no hacia ningún ademán de haberme visto. Hablaban algo de un bebé... parecían familia.
- del segundo coche apenas recuerdo que era amarillo, y que conducía un hombre jóven con barba.
Salí fuera y volví a pensar en ir a ver a mi hermano, parecía que me había desviado de mi asunto. Pero todo se desvaneció, y al instante estaba de nuevo en mi cama. Justo después de abrir los ojos en el plano físico, llamaban a la puerta para despertarme...
Conclusiones:
- muy poca lucidez: aunque era capaz de controlar mis decisiones, no lo era tanto como para ser realmente consciente de lo que estaba ocurriendo.
- tengo un vago recuerdo como si de un sueño se hubiera tratado, y el despertar ha sido algo totalmente natural.
- no he sentido ese pánico de mi primera vez, tampoco desesperación, era como si lo hubiera estado haciendo toda la vida.
- sensación de "sacudida" que aumenta con el movimiento de la mandíbula (llegando incluso a doler) jamás sentida con anterioridad.
- demasiada prisa por hacer "algo". No he sido capaz de pararme y pensar con claridad.